Estamos viviendo el tiempo de mayor engaño y, al igual que la iglesia de Pérgamo, en Apocalipsis, hay falsas doctrinas que buscan filtrarse en la Iglesia. La oscuridad seguirá creciendo hasta sumir a todas las naciones en ella (Is. 60:2). Pero en medio de la noche oscura, Dios encenderá maestros llenos del Espíritu Santo, que brillarán como las estrellas (Dn. 12:3).

 

Dios está extendiendo el llamado que le hizo a Ezequiel (Cap. 3) y a Juan (Ap. 10) a todos los santos. No se trata solo de entender o estudiar un mensaje, sino de comerlo. Esto significa que este mensaje debe llenar nuestro ser y afectar nuestras entrañas. El asunto no es que tengamos un mensaje, sino que, al comerlo, nos volvamos el mensaje.

 

Una vez que comemos el libro, quedamos habilitados por Dios para profetizar una vez más, sobre muchos pueblos, el Evangelio eterno (Ap. 10:10-11). Por eso, en esta sección queremos equiparte con recursos que te convertirán en un siervo fiel y prudente, capacitado para dar el alimento a tiempo a los que puso a tu cargo (Mt. 24:45-46).